Viernes, San Pedro y fiesta. Cosas de la Iglesia, pero yo aprovecho para ir a la piscina. Doscientos metros crol en la piscina exterior. Seguiditos, con viraje y todo. Y otros doscientos...¿y por qué no otros? ¿otros...? Buf...si hago otros serán mil metros ¡pues otros! Mil metros. Termino cansada, pero no agotada.El 100x100. No fue tan difícil encontrar el complejo deportivo Llombai, aquel amable paisano me lo explicó a la perfección. Qué buen ambiente. El año pasado hice mi mil en 4:40, y en ese momento terminé contenta. Patrykinder llega desde su retiroespiritual. Con Karmele, charlamos, comentamos, admiramos, criticamos y reimos. Toca calentar. Y mi relevo. Empiezo muy rápido y me doy cuenta enseguida, ya estoy en el primer doscientos y bajo el ritmo, una vuelta, otro doscientos e intento apretar en el último. Cuatro cero ocho. Testigo a Patry (mic mic)cuando aún estoy respirando, aparece a mi lado...Tres cuarenta y uno.
Media hora más tarde, en la ciudad del transporte, me cambio de pantalón y me peino. Rubs tiene cara de sueño ¿seguro que quieres ir?.Dice que sí. Riba-roja de túria . Sietemil metros, asfalto, a las diez de la noche. Mil corredores y la sensación de que no eres el único raro, extravagante, estrafalario o fanático (definición de friki según la wikipedia). Dos vueltas a un circuito, a ratos oscuro, a ratos cuesta arriba...siempre en compañía de alguno. Esta vez decido reservar menos, momento experimento. Así que salgo desde atrás, y voy a delantando. en la primera vuelta, las cuestas arriba no se me hacen del todo duras, y bajando adelanto mucho. Pero después llegan de nuevo y se me atragantan del todo. "esto debe servir para entrenar el objetivo del verano". Treinta y cuatro minutos veinte segundos según mi reloj, a cuatro cincuenta y cinco el mil. Sospechosamente rápido. Rubs me cuenta que han sido sólo seismilseiscientos. Eso me cuadra más. Desde luego, lo que no hice fue correr a cuatro cuarentaycinco, como reza la clasificación oficial. Cena y viaje de vuelta. ¡hasta mañana! Hemos quedado para Montán.
Media hora más tarde, en la ciudad del transporte, me cambio de pantalón y me peino. Rubs tiene cara de sueño ¿seguro que quieres ir?.Dice que sí. Riba-roja de túria . Sietemil metros, asfalto, a las diez de la noche. Mil corredores y la sensación de que no eres el único raro, extravagante, estrafalario o fanático (definición de friki según la wikipedia). Dos vueltas a un circuito, a ratos oscuro, a ratos cuesta arriba...siempre en compañía de alguno. Esta vez decido reservar menos, momento experimento. Así que salgo desde atrás, y voy a delantando. en la primera vuelta, las cuestas arriba no se me hacen del todo duras, y bajando adelanto mucho. Pero después llegan de nuevo y se me atragantan del todo. "esto debe servir para entrenar el objetivo del verano". Treinta y cuatro minutos veinte segundos según mi reloj, a cuatro cincuenta y cinco el mil. Sospechosamente rápido. Rubs me cuenta que han sido sólo seismilseiscientos. Eso me cuadra más. Desde luego, lo que no hice fue correr a cuatro cuarentaycinco, como reza la clasificación oficial. Cena y viaje de vuelta. ¡hasta mañana! Hemos quedado para Montán.
3 comentarios:
hola ,bueno ,bueno ,muy ameno tu blog ,me encanta leer y sentir tus vivencias ,me parecen interesantes,que tengas muy buen dia.
pues si tiempazo en la carrera nocturna!! jejeje
Mucha gente si, y es que en Riba-Roja hay mucha aficion por el deporte verdad? ;)
Gracias por el comentario, love crochet forever. Por tu nombre supongo que has llegado desde el blog de pendientes y pulseras (mi madre), ¡qué paciencia teneis tod@s l@s que os dedicais a las manualidades!. Envidiable :)
Sí que había gente Rubs...es que ya se sabe...en Riba-Roja... Veremos si en Albal son igual de deportivos.
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