Por la ruta de las ermitas

Esta mañana me di cuenta de que me había dejado las zapas de correr en el gimnasio. espero que no le gusten a nadie. Y no. A mediodía las pido, temerosa, y allí están. Así que paso a cambiarme, mi gorra, mi pantalón de corredora chunga, cómodo a la par que feo. Mi camiseta de la carrera de la mujer de Castellón-2005, mi botellita de agua y mis recuperadas zapatillas. No me apetece nada ir por la ronda, así que voy hacia Lidón, recordando los tiempos en los que llegar a Lidón era el único objetivo. Pues ahora no es mucho más, así que no te flipes, bonica. . Mi subconsciente me espabila.

Sigo por la ruta de las ermitas...voy creoquebien, pero hace calor, mucho calor. Me desvio hacia San francesc de la Font. Y a los veintiseis minutos doy la vuelta. Me coloco la gorra al revés...la loca de la colina De nuevo estoy en Lidón, continúo y me coloco bien la gorra. Pitada y gritos. A estos les va la marcha. Paro con cincunta minutos. Nuevemil trescientos setenta y seis metros, a cinco veinte el mil.
Y a la tarde...¡piscina!