Beselga-Garbí-Segart-Beselga

El jueves cambiolargo, encuentro un bar en mi barrio abierto a las 7:00 AM (AM, siempre AM...). Amablemente y por un módico precio, me preparan mi bocata dominguero (aunque sea jueves) y diez minutos más tarde me recogen Ana y Charly. Nos vamos de excursión. A Estivella. Al Garbí.

Hace unos años que no subo, desde la última vez que hice la subida al Garbí de Septiembre. Es decir, desde...2006.
En Estivella nos espera Hector, que nos conduce hasta Beselga, que resulta ser una pedanía de Estivella con un curioso castillo del que no queda más que la fachada, y que impresiona de frente, pero deja a uno con cara de tonto si se le mira de perfil.

El UBE team (sección sub-30, que no años sino km o sección razonable), en preparación para una posible y próxima ascensión al Aneto, comienza la ruta tras el reparto de los dos bastones y mi preocupación ante tal hecho. Mala cosa cuando la gente empieza a sacar bastoncitos. Una vez repartidos, comenzamos en marcado ascenso por una pista perfectamente transitable. Ana en cabeza y los demás, detrás. Font del Barraix. Agua fresquita y para arriba, siguiendo las marcas del GR10. Hay una ermita allí arriba, y una casa en venta..
En cuatro kilometros y medio ya hemos llegado a lo más alto del recorrido. Desde los 220 metros, nos hemos puesto en los 600. Las vistas son muy bonitas, aunque a veces se confunde el mar de nubes con los humos de alguna fábrica. De eso vivimos.
Momento almuerzo.
Y tras él, Primera bajada. Cuando Hector me dijo que bajaríamos por La Pedrera, me mordí la lengua en silencio y deseé que lo de pedrera no fuera más que un farol. Pero no. No era un farol, así que sin remedio me veo bajando por una de esas laderas llenas de piedras que tanto me gusta, piedra suelta y caida. Mi paraíso. Entre suspiros bajo cantando el "ya llegaré". Y llego. Como si fuera la primera vez que voy al monte.
El resto del descenso es sencillo Y agradable. Llegamos a Segart, donde nos recibe un tipo escondido tras su soñadoras plantitas. O el soñador era él. Y como quiere foto, se la sacamos.
Atravesamos el pueblo y retomamos el GR10. Vamos a subir por "la canal". Hector dice que vamos a subir "a ritmo". Yo sólo sé subir de una manera, que es "al ritmo que puedo", con lo que no hay demasiado que discutir. Se coloca en cabeza (que para eso es el jefe de la expedición) y los demás, detrás. Ana segunda y yo detrás de ella, cómodamente. a Carlos lo perdemos a ratos y le saco alguna foto en que su sonrisa de medio lado me recuerda bastante a una que tengo yo guardada para ciertos momentos. Llegamos al descansillo que además marca el cambio de tipo de recorrido. Se guardan los bastones: llegó la hora de la verdad.
La Canal es esencialmente eso: una canal. La forma de subir en trepando, simple y llanamente. Siempre hay un lugar donde poner las manos y los pies con comodidad, pero hay que ponerlos. Para ser un GR se me antoja algo complicado, pero es muy muy divertido de subir. En los tramos donde las manos no son evidentes, hay colocadas cadenas ayudantes. El tramo es lo mejor del recorrido, lo disfrutamos los cuatro y nos dejó muy buen sabor de boca. Lástima que haya acabado.
La canal nos deja practicamente en el mirador de Garbí. Ahora bajamos a Beselga por la Frontera, tramo de pista asfaltada y tramo senda de bajada con poca dificultad.
Y Fin de ruta.Yo creo que llegaremos al Aneto. Seguiremos entrenando.