29 de diciembre de 2011

El sitio de mi recreo

Y se anda acabando el año, lentamente, en unos claros días de viento que bien podría empujar un poco más rápido las horas. Para terminar antes. Que estos días ya huelen a usado.

Volví del Valle de Arán con una postal y un tarro de miel de castaño que no aún no he abierto. Las castañas me traen recuerdos borrosos que pinchan los dedos y más cosas. Como las castañas.

Hubo un par de salidas rodadoras, de montaña, por los sitios de siempre que no me cansan porque cada día son un poco diferentes. La pista de Les Santes la han arreglado. O no. Cuestión de gustos, lo cierto es que la han hormigonado.

Un lunes hicimos una preciosa salida en bicicleta, Oscar B, el Fugado, el Ciclista y yo misma. Xert, Canet, Rosell, Vallibona. Vallibana y el tramo de carretera nacional armando un bonito desfile de camiones. A estas alturas de año ya no recuerdo grandes cosas, más que la visita a una ermita con un perro extremadamente antipático y cobarde y unas pequeñas carreteras por la que disfruté muchísimo. Un etapa preciosa y tan dura como una quiera, o pueda. Fueron un poco más de 85 km.


Y se acabó Octubre. Y lo bueno fue que comenzó Noviembre.
Otra salida en bicicleta y de pronto era domingo y estaba apuntada a la Media Maratón de Castellón.
Como ya no sé si corro o no corro, pero a la vez cuando corro, si corro, siento que corro más, no sé exactamente qué debía hacer allí. Llevaba algunas semanas sin rodar mucho más de una hora y exactamente un mes sin hacerlo por asfalto. De todas maneras, tenía especial ilusión en participar. Y lo hice y me salió la mejor media maratón que he hecho nunca, a pesar de sentir que no podía más desde el kilómetro 18, donde me recogió un compañero que me llevó hasta meta, amable. Apenas había bajado el ritmo, pero a mi me parecía que llevaba un trote más que lastimero. 1:51 para una media con medio kilómetro de más. A la pequeña contrariedad inicial le siguió una alegría grande, no hay motivo para no estar contenta, a pesar de la desagradable cojera que apareció cuando me enfrié del todo. MMP. ¿Qué más quieres, nena?

La semana siguiente fue una típica de semanas, de desiertos y Oropesas en bicicleta, de rodada de Martes, o de Jueves. De mañanas, noches y tardes.


5 comentarios:

Genín dijo...

¡Feliz año, preciosa!
Besos y salud

MANOLI CXM dijo...

Feliz 2012, hoy anduve escuchando a Nacha Pop, qué coincidencias.
De este año no pasa, nos tenemos que ver pronto Nere un abrazo. Vente a la Tuercelimas mañana!

miguelflor dijo...

Nere, nunca dejarás de sorprenderme por lo bien que escribes y por la cantidad de rutas que te marcas por Pirineos, sola o acompañada, aunque sea por unos palos medio rotos, el caso es que tus buenas palizas te pegas. Feliz 2012, kms. y salud!!!

javi dijo...

FELIZ 2012!!!!!!!

Gracias por tu visita al cadáver bloggero de mi hogar jejeje Sí que acabaste el año fuerte!!! MMP y con medio kilómetro de más!!! Se ve que el Papa Noel de los buenos entrenos te trajeron un buen presente.

A ver si no es nada la cojera que no cabemos más de baja pffff Estoy empezando a trotar 20´ tras ir al fisio (esto es top secret ya que no he publicado nada al blog jajaja). A ver si me/nos animamos y seguimos contando.

Salud, feliz, amor y curro para este 2012 :)

depiedraenpiedra dijo...

Un beso chicos.