Multifuncionando

El jueves tocó ronda: breve ronda porque me dió un ataque de calor cuando cruzaba hacia la ronda auténtica...28 minutos duré. Luego a andar y al ratito, termino trotando. Luego rehabilitación. La flexión de la rodilla ha aumentado unos cuantos grados. Esto marcha.
Viernes, entre pitos y flautas me surgen dosmilsetecientosocho imprevistos laborales (o no) y me conformo con acudir a la piscina (tarde).
No estoy demasiado contenta con la semana, pero, supongo, que si estaba cansada, tenía que descansar.
Fin de semana. Como acudir a la Volta al Terme lo había descartado por completo y Patri se había librado de acudir como masajista, teníamos la oportunidad de hacer algo largo. Y aquí lo detallo, para que quede constancia.
Sábado, de buena mañana: recuerdo que la tuna viene a mi casa esta noche leches, tengo que recoger ésto un poco... Con la bici y mil trastos más me dirijo a....¿dónde aparqué? Ejercicios de flexibilidad mientras averiguo cómo rayos se echan los asientos hacia adelante. Voy a buscar a Patrikinder con mi peculiar estilo de conducción, y tras unos nuevos ejercicios de fuerza y flexibilidad para meter todo aquello en el maletero, nos vamos a Montanejos.
Montanejos. Después del baño de rigor y de comer en el antiguo refugio de escaladores, nos adentramos en el barranco de la Maimona para ver qué se cocía por aquellas paredes. La Meca de la escalada deportiva de la Comunidad. Nos pica el gusanillo y volvemos al coche a buscar el material...pero tarde...una inoportuna lluvia nos deja sin trepada...y sin bici.
Con el mapa en las manos, montamos en el Neremóvil: Nos vamos a Penyagolosa. La ruta: Montanejos-Zucaina-Villahermosa-Puertomingalvo-San Joan. El mapa con pistas que no existen. En el camino pistas que no están en el mapa. El mapa que estuvo a punto de salir volando por la ventanilla. La vista de Patri hace que lleguemos a nuestro destino, estábamos en el GR7...
Lloviendo como estaba cuando llegamos, se nos estropeaban un poquito los planes...Subimos la bañadera en coche..y subimos al pico desde su falda. Veinticinco minutitos. Y allí arriba, todo es hermoso. Diez minutos saltando entre piedras, y llegamos al coche otra vez. Montamos algo para dormir, cenamos...Y a las cinco de la mañana suena el despertador. Ya no llueve, pero hace un frío del quince.

Domingo: Remoloneamos, pero salimos hacia el pico de nuevo, con el frontal en la cabeza y con toda la ropa que llevábamos puesta. Y vimos amanecer. Y todo volvió a ser hermoso, y rojo... Patri ha dejado de sacar fotos creo que se está poniendo azul. Mejor bajamos ya...¡hace un frío!
Después de desayunar, decidimos: nos vamos al Castellet, es el momento de empezar a escalar, de nuevo (yo), por primera vez (ella). Las vías estaban donde siempre, y a pesar de eso consigo pasarme el parking una vez, y casi, dos veces...covetes está ocupada vaya, bueno, no pasa nada. Pedro Navajas es una placa un poco tumbada, de quinto fácil. La primera chapa está un poco lejos, pero no pasa nada. Breve clase teórica de funcionamiento del material de aseguramiento y me subo a colgarme de la primera. Patri prueba, me baja. Lo ha pillado rápido. Esto marcha. Luego sube ella, no se asusta, no grita, no intenta bajar con las manos...Esto marcha.

Después de varias pruebas, considero que ya está lista. Subo, me baja bien, y, con la cuerda en top, la encadena ella también. Baja contenta.

Covetes ya está libre, la hago fácil. No escalo desde el siete de diciembre (bendito blog) y además estoy probando la pierna. Es la primera vez que no es Oscar el que me asegura. Y cambiar de compañero de cuerda es duro. Aún así, creo que subo bien, sin momentos de crisis, sin dolores. "nere, es que esta vía la has hecho mil veces" mi yo me habla. Llego a la reunión, la arreglo y bajo. Es el turno de Patri, su primera covetes. Adoro esa vía.