31 de julio de 2007

Otra noche


Domingo llegó y se fue.

La mejor forma de combatir un lunes es convirtiéndolo en otra cosa.
A las siete y media me doy cuenta de que me sale más rentable hacerme socia del trepacastellet que comprar un bono de rocódromo en el PeriSport.
A las nueve, en la parada del bus, me espera Patry con su coche provisional. Nos vamos al Desierto de excursión, de noche, como las malas.
Comenzamos andando desde el Monasterio hacia Bartolo, pero nos desviamos hacia la Mola del Morico, o ese era el plan. Patrikinder con su nuevo frontal de cuatro leds y yo con mi cabeza de chorlito y mi visión nocturna a pelo < voz de idiota >"uy, me he dejado el frontal en casa"< /voz de idiota> . Voy de segunda, a parte de porque no veo mucho, porque es Patrikinder quien conoce el camino. Lo aprendió la semana pasada. Ascendemos por senda estrecha, cada vez más estrecha. "¿nos subimos ahí encima?" "¡vale!" Pasito, pasito...y arriba. La vista es mejor que desde Bartolo, hay menos luz y no se oye nada sucio. Destrepamos con cuidado y continuamos. Un día saldremos en el periódico.
Definitivamente, hemos perdido el camino. Media vuelta y regreso a nuestra piedra. Bocata, conversación...A las mil, emprendemos las vuelta. No sé bien por qué, pero no hacemos más que destrepar cosas...es divertido, pero...Un día saldremos en el periódico.
Reencontramos la senda, resbalones varios...El frontal de Patry me ilumina por detrás y provoca una enorme sombra. En el Monasterio, el coche solitario. Y de vuelta, coches que suben....¿dónde irán?...es la una.

2 comentarios:

lola dijo...

jejeje,cuidadín, cuidadín, procuren no salir en el periódico.

depiedraenpiedra dijo...

no preocuparse madre, está todo controlado
jejjejejejjje

jejjejejejejeje