¿¿Regularidad??

Sábado. A las nueve en Penyeta… Hemos quedado para hacer club, Y allí estamos el Rubs, la Patry, Manuel, Trini, Maria José y aquí la de las piedras…Allá vamos, rumbo al GR33…recuerdos de la marató i mitja.

Anda que te andaré vamos dejando cintas a nuestro paso como pulgarcitos cualesquiera. Sube y baja vuelve a subir, caminamos haciendo hambre y paramos para almorzar. Cintas de cocacola por todas partes, flechas fucsia, marcas de GR…. Saturación de recorridos marcados en una zona tan pequeña. Y que como lo de mañana no es una carrera-carrera, no debemos poner demasiadas señales. Eso opinan algunos.

Cruce difícil, si lo marcamos, no se sabrá por donde seguir….hay una carrera de BTT que sigue también unas cintas de cocacola "como si no hubiera más marcas de refresco"…si no lo marcamos, los caminantes se nos irán por el recorrido de las bicis. ¿pero nadie tiene un rotulador? ¿y una estaca? No, las estacas me las he dejado en casa....tenemos espray en el coche…luego volvemos. La Patry y yo…enrolladas.

En la base del Tossal nos desviamos y volvemos…eso era el kilómetro 10. Así que completamos unos doce de paseo. Rubs se vuelve a casa y Patrikinder y yo, armadas con el espray rojo, nos vamos en búsqueda del cruce. Lástima que las ganas de entrenar tendieran a cero. Trotamos brevemente sin demasiado ímpetu, hago una parada técnica, y cuando vuelvo, Patrikinder está tan acoplada que no me queda más remedio que buscarme una piedra cómoda…y allí nos quedamos casi una hora. Pero debemos continuar, estimamos en dos horas la ida y la vuelta hasta el cruce conflictivo. Lo encontramos, no precisamente gracias a las cintas que habíamos colocado…y lo marcamos “REGULARIDAD”. En rojo. Pa’que se vea. Lástima al día siguiente pareciera rosa…y parte del recorrido ajeno que iba a no sabemos dónde…

Avituallamos ilegalmente sin abrir precedente, y volvemos, congeladas de frío…necesito una sopa. Y eso…20 kilómetros de pateo.

Domingo A las 7:45 en el cisne, a las 8:05 en casa de la Silvi. Patrikinder y yo hacemos rutita y llegamos finalmente a Penyeta. No sé si ver allí a la gente ha convencido a Silvia de que la hora no es tan intempestiva, incluso siendo Domingo. Las hermanas Almela y Manolo representan a los amics del Clot, Y Rubs ha engañado a una compañera de trabajo…la refinería queda también bien representada. Mayoría de socios, También Irene y Miguel vienen acompañados. Nos han pintado esto tan fácil que la hemos vendido como un paseíto por el monte.

Comienza la prueba, somos unos cincuenta. En cabeza: el hombre de rojo y patrikinder. Manolo, Rubs, Irene, Miguel… vamos algo en grupo…que subimos, que bajamos…que por dónde…Nere…. Patrikinder surge de detrás de un árbol, a la cola…me he perdido. Menudas sherpas.

En lo alto de un monte me paro, más sola que la una… a lo lejos (muy a lo lejos) distingo a Irene. A lo lejos , más tarde supe que me distinguían a mi Patrikinder de un lado, y las gacelas rubias de otro... Decido bajar recto…de pronto ruido de caballos, de pasos infernales…Buscamurs y Sinsuela, Julia y Ximo van encabezando un grupo kamikaze, asustada, me aparto…desaparecen en la lejanía y yo continuo tranquilamente con la chica de la Parreta. Rubs en el horizonte, no sé en qué momento…vueltas y revueltas, continuamos…por aquí ¡¡no!l por allá…los cuatro kilómetros finales no eran cuatro kilómetros ni de coña…cresteamos por no sé dónde, ¡¡bicis!! ¿este será el camino? ¿por qué hay bicis? No sé cómo ni por dónde, llegamos a Penyeta. Dos horas cuarentaycinco. Madre mía…habíamos dicho a las andarinas que tardarían unas tres horas.

En fin, poco a poco fuimos llegando…risas y más risas. Menos mal que nos tomamos las cosas con filosofía y nadie nos colgó de las orejas. Lo mejor, con diferencia, el post-carrera. La Silvi y su compañera terminaron…espero que nunca lleven a cabo las venganzas que les dio tiempo a idear durante su largo caminar.

Terminamos la tarde en el Castellet. Tantas veces lo hemos visto este fin de semana desde todos los ángulos posibles, que no podíamos fallar. Escalamos covetes y nos vamos. Estamos cansadas.