3 de agosto de 2009

Ultra trail del aneto. De escobas y tormentas.


Si algo puede salir mal, saldrá mal. Salvo excepciones. Esta es una de ellas.

Ultra trail del Aneto.

Al principio (y principio, en estos casos, son unos 10-12km) todo era normal, ocupaba mi posición natural y avanzaba tranquilamente. Luego vino la pajarilla: las lucecitas y el leve mareo que me costaron media horita entre unas cosas y otras. Entre eso y que no había quien bebiera de la bolsa de agua. Pero ambas cosas las solucioné sin darles demasiada importancia. A la presa de Llauset llegué de las últimas pero bien de tiempo y con buena cara. Allí me encontré con unos relajados Irene y Miguel, que, tras algunos contratiempos, también se tomaban la vida con filosofía.

Tocaba volver por el mismo camino, no parecía tener pérdida.

Pero el viento poca cosa buena auguraba, el grupito de tres de delante había desaparecido y los compañeros con los que iba haciendo la goma en la ida se habían quedado en su mayor parte, en el control. Yo seguía, de hito en hito, de piedra en piedra. El valle de Vallibierna es un enorme pedregal. Se iba oscureciendo el sol a medida que progresaba. No pasa nada.

Miraba al cielo, y a mi alrededor. Nadie. Absolutamente nadie. Aquellos a los que llevaba a vista habían desaparecido. Por un momento me arrepiento de meterme sola en estos fregaos. Llueve un poco. Avanzo por el valle trepando, destrepando y saltando. Me da la sensación de que se está haciendo de noche. Se escuchan truenos lejanos. Van creciendo el viento, la oscuridad y la sensación de estar sola en mitad de todo aquello. Se complica. Empieza a granizar. Otra vez. Otra vez no. Las manos heladas, otra vez. Pero esta vez las necesito para salir de allí, tengo que seguir trepando y destrepando (lo de saltar no es preciso) y no puedo mover los dedos. [modo tragedia griega ON] Se han acabado mis años de suerte. Quiero una manta. Me tengo que cambiar de ropa. Que escampe…que escampe ya…no puedo seguir… [modo tragedia griega OFF]

De pronto entra en acción mi yo inmortal, que grita, ¡¡tormentas a mi!! ( quizá fue un poco menos impetuoso, no estaba el horno para bollos…)….pero bueno, en todo caso decidimos (mi yo inmortal y yo) seguir avanzando y llegar lo antes posible al collado. Mientras, pienso que tal vez se hace de noche, y vuelve el viento, y graniza de nuevo. Y otra vez más.

En lo alto del collado encuentro, por fin, seres humanos bajo un toldito semi-improvisado. ¿estás bien? Estoy bien, sí. Eso parece. ¿cuánto quedará hasta Coronas? Pues…unas dos horas y media. ¿lo dejas allí? No, no…si para la tormenta y me seco, no. ¿puedes bajar? Sí, sí…

La suerte de todo esto es que la lluvia compactó la tierra suelta pero no hizo que las piedras resbalaran más que antes. Así que bajé aquella pedrera fácilmente, y llegué a una de las conclusiones de la jornada: “para que algo deje de darte miedo, sólo hace falta que ocurra a la vez que algo que te de más miedo”. Es la teoría del dolor aplicada al miedo.

Fue sorprendente como al perder altura, pasar un rato, y llegar hasta los Ibones de Vallibierna, descubrí que aún era de día. Y que además quedaban algunas horas de luz. Seguí andando pausadamente dándole vueltas a la idea de ponerme el polar que llevaba, tímido, en la mochila, quería estar segura de que no se iba a empezar a llover en cuanto lo sacara, como indican las leyes de Murphy. ¡Tranquila! ¡¡llevas gente detrás!!. Buenas noticias. ¿necesitas algo? Pues---no. ¿puedo seguir? Claro. Menuda pinta debo tener, o no, a las chicas siempre nos cuidan más. Aupa neska!, gritaban durante todo el recorrido. A los maromos de mi alrededor, ni mu. El chico se aleja trotando y al poco rato se para. ¿seguro que estás bien? Si, tengo un montón de frío…pero aparte de eso..voy bien. ¿pero te has cambiado? No… ¡¡tienes que cambiarte!! Te ayudo…y sorpresa, el polar seguía seco. El hombre me coloca los guantes. ¿mejor?...sí…seguimos andando juntos. Ha decidido seguir conmigo. Repito, menuda pinta debo llevar, aunque yo creo que ya estoy recuperando el color de ser humano.

He decidido terminar. ¿tú vas a terminar? Pues sí, ya no me pasa nada…pues seguimos juntos….Y así comenzó la segunda parte de este trail, con una nueva conclusión. La mejor manera de reafirmarte en la idea de continuar es que te lo propongan los ojos más azules del valle de Vallibierna (y alrededores).

Continuamos para bingo, dijimos en el control de Coronas. Y durante toda la pista siguiente fuimos charlando, y yo apretando un poco el paso. Al poco de empezar la segunda parte del recorrido nos cruzamos con Irene y Miguel, que tras haber vivido también su tormenta perfecta (irene dixit) y siendo esto sólo una prueba, habían tomado la sabia decisión de regresar por sus pasos a Benasque. Pista arriba pongo ritmo de crucero y mi acompañante, que hacía 10 km pensaba que nos quedaban unos 15 y al que saqué de su error con un….mira, yo creo que nos quedan más de 40…empezaba a quedarse atrás. No, si yo lo máximo que he corrido en mi vida son diez kilómetros. Siguiente conclusión. Los ojos más azules no necesariamente han de pertenecer al más consciente.

En Baños de Benasque me senté a esperarlo comiéndome mi ensalada. En eso apareció la escoba con otro participante. Y desde arriba seguían bajando corredores y corredores, todos iban ya camino a meta. La escoba me aclara que van unas tres horas por debajo de su tiempo y que querían contactar con nuestro grupo para que fuéramos tres. Y, a ratos con la escoba (de la que, por otra parte, me empeñaba en huir) a ratos sin ella, fuimos haciendo unos cuantos kilómetros por un GR bastante bien marcado y con la inestimable ayuda del forerruner.

La noche pasaba y pasaba, y nosotros sin avanzar apenas, muy lentos. Me adelanto, me espero, me adelanto, me espero…

Al llegar cerca del último control el recorrido está bastante difuso, el GPS me marca el camino, pero en el terreno no se ve huella ni sendero. Escombra llamando a Aigualluts. Hacednos una señal. Por lo menos una mitad de la escoba conoce algo el terreno. Hemos de buscar la cascada, sólo podemos hacerlo guiándonos por el sonido. Cuando llegamos a ella aparece el señor del control, que nos propone recoger entre todos y bajarnos juntos hasta el siguiente. Hace rato que esto me parece un coñazo. Es de noche, no se ve ni torta y quiero terminar de una vez, sólo nos quedan 18. Eh…chicos, yo me voy… Pues que uno la acompañe. Bueno, mejor que baje uno con ellos y el otro que se quede a desmontar. Y yo preguntándome por qué tenía que venir la escoba con nosotros. Inocente.

Bueno, que yo me voy. Sería conveniente que no te fueras. No debemos romper el grupo. Acabáramos. Voy delante, el camino no parece estar marcado y el señor escoba no se sabe el recorrido. Lo que le hace falta a mi amigo de los ojos azules, que va desde hace rato con un paso más que cansado y con dolores varios, es ir perdiéndose continuamente. Porque si yo me desviaba, ellos detrás. Fijarse en las señales...para qué.

Hasta el momento amanecer, cuando ya estoy harta de todo. Pierdo la señal de GR, y las ganas de buscarla. Nos metemos en el río, nos mojamos los pies. El tercero (Francesc) da vueltas y me pregunta por el track. Gruñido. El de los ojazos se resigna. Y la escoba da vueltas y vueltas, y más vueltas. ¿y por carretera se llega? Yo sé lo mismo que tú. No me cabe en la cabeza que la escoba no conozca el recorrido, que no lleve un GPS con mapa, o el camino dibujado en una servilleta, o una carta del SXII…algo. Me desespero. Pero de nada sirve. Al rato ratísimo, la escombra encuentra el GR, que no tiene pérdida. Y me voy. Salgo todo lo disparada que puedo hasta la Besurta, donde la otra media escoba (Xavi) me indica por donde he de seguir. Besos y abrazos. Enseguida me alcanza Francesc. Y agilizamos el paso, 12 kilómetros, sólo 12. En el control de Barrera se me saltan las lágrimas. Sólo seis. Sólo seis. Llegamos a meta. Trotamos.22:50. Veintidós cincuenta. Me da pena no entrar con Juan, pero ya eran demasiadas horas y demasiadas neuronas aplastadas.

Y de esta extraña historia me quedo con Juan, su fuerza de voluntad y su poco conocimiento. Con la cara del hombre escoba. Con los pensamientos durante la tormenta. Con que no me he sacado la espinita de Nùria, porque hay veces en que un clavo no saca a otro clavo. Con los preciosos paisajes que vi la mañana del domingo. Con el amanecer en Pirineos. Con la ovación clamorosa al último. Con el frío en las manos y la soledad del valle.

20 comentarios:

Genín dijo...

Eres admirable!
Parece que estás hecha de acero!
Besos y salud

Txopo dijo...

q bonito!!!...q bien lo cuentas!!!..q envidia!!!!...y q mania de querer ir sola!!!

;)

Trans+Aneto (2) a (1) Nuria...yo creo que si quita la espinita..pero tu eres muy rarita y no piensas asi...en fin.

:P

lola dijo...

Estoy muy orgullosa de ti. Pero comprende que como mami me preocupen todos estos fregados.
Esos de los ojos azules debe de ser algo genético. ;-)

javi dijo...

Hola Nere

Que campeona eres!!!

Lástima el tiempo y el escoba, que al final ya era el escombra en la crónica... Es un poco alucinante que no sepa el camino, ni lo tenga marcado; sólo servía para barrer el Aneto ;)

Me alegro que el Nere inmortal tumbara al modo tragedia griega jejeje

A recuperarse

Irene dijo...

Ay mare meua!!! Que manera de padecer!!! Enhorabuena otra vez, no sé cómo te atreviste a seguir, desde luego tienes un valor...por muchos ojos azules que te lo dijeran...En fin, toda una aventura, para contar a los nietos...
A ver esa cervecita que tenemos pendiente!!

Anna dijo...

Hola Nereeeee. Qué pasada de crónica, me ha gustado un montón. Vaya tía más fuerte y dura. ¿de qué estás hecha?

Lo tuyo son las distancias largas, por lo que veo....

Me alegro que terminaras con buen sabor de boca y me han encantado tus dos conclusiones, la del miedo y la de los ojos.

Un placer leerte de nuevo.

Un besazo wapa!!

sinsuela dijo...

Caray Nere, ¡¡¡leerte emociona!!!

Como ya te dije, pero qué dura eres! Desde luego lo de piedra te va... ;)

Vaya rollo con la escoba, si al menos hubiese servido para algo... Yo tampoco entiendo como ponen a alguien que no tiene ni idea del camino.

Y olvídate de Nuria. Esa no tocaba porque tocaba ésta. Ya habrá otra Nuria.

Cuídate wapetona!!

JUNGLA dijo...

Joer Nere, hacía tiempo que no te leía y me encuentro esto. Eres.....(sin palabras).

Esta mañana trotando con un compañero que acaba de venir del Camino de Santiago me acordé de tí. Si tienes algo en mente sobre esto en temporada de poco frio, avísame con tiempo a ver si me cojo unos días. ;-)

Lo hablamos.

¡Enhorabuena por todo lo que haces!

The Dark Knight dijo...

Enhorabuena Nere McLeod ;) jeje (se oye de fondo el "Who Wants to Live Forever" de Queen),por aguantar y resistir,y por contarlo así de bien en,para mí,una de las mejores crónicas que te he leído por aquí.Me ha gustado mucho.

Me hubiera gustado ver la cara del tipo que pensaba que solo quedanban 12 Km. cuando le dijiste que eran más de 40 los que quedaban!!!¡¡¡¡...

Nos vemos en Vistabella si subiís.
Saludoss.
Adeuuu!!

Fernando dijo...

Cervecita Irene? Habeis dicho cervecita?

Pues enhorabuena Nere. Poco más te diré. Eso sí, que dos narices pusiste para seguir en plena tormentita...

Nos vemos el sábado!!

Unknown dijo...

Felicidades, muchas felicidades.
Joder, dejas patidifuso con tus palabrillas y tus aventurillas cortas.
Gracias por todo.
PD: Más felicidades, muchas más.

Armando dijo...

Ya te lo he dicho en alguna ocasión, que bien escribes, joia.
Pedazo de relato.
Enhorabuena por lo que haces y como lo haces.

depiedraenpiedra dijo...

gracias Genín!

Casi siempre, Txopete...casi siempre. La espinita, te digo yo que no sale. Te falta la trenkakames :P

No se preocupe madre, no pasa nada.

jejej...pues sí Javi...escombra la llaman allí...ni escoba ni granera..¡escombra! flipante que no supiera el camino...ays...gracias!

Es que eran muy azules Irene ;) cerveza sí.

Gracias Anna!! tienes que contar lo del parapente!!! :) un besazo.

Hola Julia, muchas gracias a ti tb. Más cerveza!! (clarita)

Jungly! que alegría!!. Para el año que viene sí me gustaría hacer algo del camino unos días. Lo hablamos. Te llamo. Otra caña.

Hola adri! me alegro de que te haya gustado!! No puedo ir a vistabella.. :( buscaremos alguna volteta!!

Más cerveza para Fer!! El sábado, por ejemplo.

Oscarrr ya tenemos fecha!!!!!!!! cuidate mucho.

Muchas gracias Armando!!

Al final me lo voy a creer chicos, un beso, y gracias por la visita.

Vicente dijo...

Me he quedado sin palabras, Nere.
...
...
¡Eres única!

Cuídate.

Un fuerte abrazo

mariló dijo...

Jo xiquilla, ya no se que decirte que no te hayan dicho por aquí, la vedad es q tienes una fortaleza increible, aunque ya fui testigo de ella en 1º persona en la trenkakames, así que curada de espanto estoy. Me imagino lo orgullosísimos que pueden estar tus padres de tí.
Por cierto por aquí tengo en casa a una xiquilla que creo que conoces, ya sa quedao con los aguelos/as del poble esquiando con patines, espero que lo esté pasando bien por aquí! muchos besos a todos !

Alfonso dijo...

Para no querer escribir nada menuda crónica increible te ha salido, tienes talento para escribir.
Yo creo que la espina de Nuria está totalmente superada, al final 22 horas y grandisima ovación.
Si mantienes la moral tan alta como cuando salistes en esta carrera puedes superar cualquier prueba, sino ahí está el resultado.
Lo mejor, ese inmortal tuyo.

miguelflor dijo...

Nere, te ha salido con la crónica y la carrera, pundonor, cabezonría?...

Te has quitado no solo la espina de Nuria, sino todas las espinitas clavadas, eres una peleona. Te debería de hacer el carnet, de mi club de finisher....

Enhorabuena, y no dejes nunca de correr ni de ...hacer cronicas.

Syl dijo...

puff...qué super cañera eres, Nere!!!...
Me ha encantado la crónica...qué risa tus comentarios sobre el ojos azules!...o el escoba medio perdido...(qué raro esto, no?...).

Tu fuerza de voluntad es tremenda...con eso, niña, se llega a todas partes...

Felicidades por ese trail del Aneto (yo te aseguro que a esa carrera le tengo mucho respeto y no me han entrado aún las ganas de hacerla).

Besitos, guapa.

BUSCAMURS dijo...

Acabo de leer la crónica entera... y de verdad me ha emocionado. Qué verbo y qué valor para seguir y seguir contra vientos, tormentas y pedregales!!
Enhorabuena una vez más y a por la siguiente meta, puedes con la que quieras.

depiedraenpiedra dijo...

Gracias vicente, qué alegría verte por aquí!. cuídate tu también.

Gracias Mariló. La chiquilla esta se queda con todo el mundo, es que es única jajajaj

Gracias Alfonso. Ganas de contarlo y de no olvidarlo, más que talento.

jajjaa, yo quiero ese carnet, Miguel. Estoy atenta a tu vuelta a CArros, espero que se te de muy bien!.

Hola Syl!! el año que viene la montan aún más gorda por allí. A ver si nos cuadra y vamos :)

Gracias Ximo!! :) También sigo tus pasos rumbo a la CCC. Se te dará bien!

un beso a todos chicos, gracias por la visita