La extraña MiM

La semana pasada tuve un achuchón terrible de trabajo (que no cesa) y no pude hacer todo lo que hubiera querido...cosas que pasan.
No obstante:
Miércoles, piscina y rehabilitación - Jueves, rehabilitación - Viernes - Piscina, y me escaqueo de la rehabilitación. La verdad es que no sé si me está sirviendo de algo. Pero bueno, tengo que ir.

El fin de semana se presentaba intenso y divertido. Fin de semana de la MiM.
A las cuatro y media de la mañana hemos quedado en Castalia. Con las bicis, la Patri y yo. En linea de salida practico levantamiento de vallas y levantamiento de bolsas ¿¿qué mete esta gente en las mochilas??. Por primera vez me planteo que las bolsas no viajan solas hasta San Joan. Pero como hemos quedado en Useras a las siete, nos libramos del momento milbolsasalautobús. En Useras continúa nuestra actividad deportiva con el y otras del mismo palo. Nos convertimos en Guardias Civiles (sin bigote) e intentamos que los conductores no nos atropeyen a nadie. En realidad lo que más hicimos fue aplaudir. Pasaron muchos muchos conocidos. Qué envidia me dan...a pesar del calor. Van como motos.
A las diez y media relevo: chicas al camión. Con el Patrimóvil acreditado, subimos a San Joan. Habían llegado los cinco primeros. qué pena. Charlo con algún amigo retirado no pasa nada, mejor así que ponerse peor Abandonar es muy duro. Yo lo he hecho dos veces, en Alfondeguilla, y la sensación no es agradable.
Y comienza la MiM de bocadillos. de jamón, de atún o de embutido. Esto es para el caldo en el restaurante. Y dentro del vale para el caldo...¡¡la publicidad de Mans!!Maldita la hora en que tuve esa brillante idea. Ya no nos quitamos de encima al señor de los masajes, ni a sus papelitos del copón.
Y siguen llegando corredores, Suat, el primer conocido. Xemal el segundo...y van pasando horas y horas de jamón, de atún o de embutido. Y unas rosquilletas.
Cuando se cumplen las 15 horas justas, llega la escoba. Aplauso y foto de familia.
Y a desmontar la paraeta, entre risas y fiestas. Tenemos habitación en San Joan, nos toca la suit.

Por la mañana comenzaba nuestra aventura. ¿seguirán las bicis en el árbol?. Al Señor de Gandía que cada año participa en la carrera y después baja en bici hasta castellón, le han endosado llevarnos hasta Castellón, pero eso aún no lo sabíamos. Oye, que bajamos juntos A mi la idea me medioconvence, pero odio hacer esperar a la gente y no sé...aunque él no parece tener prisa.
Tramo 1: la banyadera. Menuda gracia. Y yo con las cubiertas lisas...pie a tierra en más ocasiones de las moralmente aceptables, llegamos al cruce previsto. Señor de Gandía va a subir al pico y bajar, nos encontraremos por el camino.
Tramo 2: Patri y yo continuamos por la pista, subir, bajar...voy muy lenta porque todo me da miedo y las ruedas agarran más bien poco. Paramos a sacar fotos y enseguida tenemos con nosotras a Señor de Gandía . La pista se me hace interminable, aún prefiero subir que bajar. La Patri se lanza cual kamikaze...la inconsciencia de la juventud!!. Al llegar a la carretera monto una fiesta. Y seguimos a Llucena. Bocata, de jamón, de atún o de embutido,y p'alante. Carretera y manta. Figueroles, Alcora, San Joan todos los pueblos tienen carrera. ¿Castellón?..o mejor Villarreal...Pues como hay carril hasta Betxí. Y chino chano, en Villarreal que nos plantamos.
Y setenta y siete kilómetros entretenidísimos en las piernas. Y planes para repetir. Y dolor de lumbares. Y euforia. Y el señor de Gandía es un máquina.