El domingo bastante hicimos con volver.
Lunes, piscina. Mil y pico metros, con tablita y pull, que habrá que mejorar la técnica. En la piscina final, de reojo, veo que Rubens se ha picado. No se puede confiar una.
Martes
Tren hacia Teruel, tren equivocado primero. En los TRD no se pueden subir bicis, así que después de que aquel hombre actuara el freno de emergencia porque él no iba a ninguna parte, el revisor ya nos llegó alegre. ¡En Segorbe: abajo!
Y en Segorbe esperamos pacientemente el Regional. Al entrar a él, a lo lejos, divisamos a un atemorizado ciclista atrincherado tras su bicicleta. ¿me candais la bici? Claro hombre... Cuando la extraña pasajera de enorme maleta y nada despreciable trasero abandonó el vagón, pudo explicarnos que momentos antes, ella le había pedido besos, y más tarde, tentado a que aprovechara...Cosas que pasan en un tren regional casi vacío.
Al día siguiente, no podía ser menos que Miércoles. Vamos a desayunar bien, que nos espera un ratico de bici. Rumbo a Dinópolis, esta vez me confundo en el acceso a Fuente Cerrada, subimos en balde una cuesta que luego hubo que bajar. Pero poco después ya estábamos en el camino correcto, solitario y precioso como el mes pasado. Inicio de nuestra vía verde, pedalea, pedalea...Esta vez no me equivoco en el desvío del Puerto de Escandón, túnel y ya estamos donde debemos estar. El ritmo no es malo. pero yo siento ciertos dolores en la rodilla derecha. Me acompañan desde hace algún tiempo, en cada subida que hago con la bicicleta. Puebla de Valverde, Sarrión...ese llaneo. Y Barracas, con su llano interminable, su viento en contra. Hubo un momento en que me sentí muy muy lenta, no quiero forzar la rodilla, quedan algunos kilómetros aún.
Pequeña parada a comer, y continuar. Tras Barracas el camino se hace fácil, y divertido entrepequeños toboganes y piedrecitas. Parada en Caudiel. Parada en Altura: necesito un café.
En el kilómetro 90 me siento muy bien, ya apenas hay subidas así que, aunque no paramos de pedalear, ya no me molesta la rodilla. Además no hace nada de calor: día perfecto.
Tras Altura, Segorbe, Veeenga que ya no queda nada. Botellas de vodka y pintadas anuncian que estamos cerca (debajo) de Masía.
Soneja....Sot de Ferrer. Los tres a los que pasamos hace un rato, me adelantan mientras se me cae la cadena. Van picados. Pues no estoy yo para piques ahora...
Nueva paradita. Y Algimia. Y fin de la vía verde, ese cartel que la otra vez no vi. Aún estarán los picados dando vueltas por carreteras rumbo al Puerto de Sagunto. Nosotros, desde Torres Torres, por vía de servicio, hasta Renfe Sagunto. No era el camino bueno, pero fue el que hicimos. Y al final, 142km en bici de montaña, a 15,5km/h. Buenas sensaciones en general, excepto el último tramo de carretera en el que me temblabaln las rodillas al bajarme de la bici, la cosa se solucionaba no bajando.
A la próxima: desde Ojos Negros.
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